Lo más importante en una entrevista

Cada vez que un candidato se postula en un puesto de empleo, suelen ser decenas e incluso cientos los aspirantes con experiencias y conocimientos parecidos que también lo han hecho. Por ello, resulta hoy en día muy complicado pasar al siguiente paso del proceso de selección tras enviar nuestro CV y carta de presentación. Cuando por fin nos llaman para realizar una entrevista de trabajo debemos cuidar cada detalle del tiempo en la que estemos en la empresa para ofrecer una buena imagen y demostrar que somos la persona idónea para el trabajo. Hoy queremos hablar de la importancia de centrarse en los puntos fuertes durante la entrevista para evitar perder el tiempo que pasemos con el reclutador y en un periodo breve dejar constancia de nuestras principales habilidades y experiencias.

Últimos trabajos relacionados. Una de las primeras preguntas que hará el entrevistador es para averiguar los anteriores trabajos del candidato relacionados con el puesto de trabajo que oferta la empresa. Si es un tipo de entrevista donde el reclutador no lleva el peso de la conversación, es recomendable que el aspirante se centre en sus anteriores experiencias como punto más fuerte. Y es que poder demostrar que ya se han realizando tareas similares es el primer paso para que el entrevistador sienta confianza con nosotros y se interese en conocernos mejor.

Disponibilidad. Es importante que mientras el postulante habla, de constancia de su total disponibilidad en caso de poder incorporarse al puesto de empleo. La compatibilidad de horarios, el disponer de un vehículo para desplazarse, la cercanía al trabajo o el tipo de responsabilidades familiares que el aspirante tiene, son algunos de los datos que el entrevistador quiere saber a lo largo de la entrevista y que de hecho son para él fundamentales a la hora de tomar una decisión final. Por eso, es importante que a lo largo de la entrevista el candidato le de mucha importancia a explicar cuál es la disponibilidad actual en relación a la vacante ofertada.

¿Por qué debo ser yo? Otro de los momentos clave de toda entrevista es cuando el candidato por unos minutos saca lo mejor de él y tiene que dar los motivos al reclutador de por qué debe ser él y no otro el que consiga el empleo. En ese instante hay que juntar todos los puntos fuertes del aspirante y presentarlos de forma global; ahí es cuando es necesario hablar de formación, idiomas, habilidades, logros o premios que se han obtenido a lo largo de nuestra trayectoria profesional y que podrían ser interesantes para la vacante a cubrir.

Brevedad, ideas claras. Los entrevistadores hoy en día se ven saturados ante tanta demanda de personal y cada vez que publican una oferta de trabajo son muchos los que cuentan con un perfil interesante para el puesto. Por eso un reclutador agradece la brevedad de los candidatos, es decir, una persona que tiene las ideas claras y va al grano a la hora de explicar sus principales experiencias y conocimientos relacionados con el trabajo. Alguien que no ‘va con rodeos’ y se centra en los puntos más importantes de la entrevista valora su tiempo y el del reclutador y esto es muy reconocido por éste último.

Qué evitar en la entrevista

Y si hemos tenido en cuenta los puntos fuertes de una entrevista de trabajo, el candidato también debe ser qué evitar para pasar con éxito este proceso de selección. A continuación te dejamos un listado con las 10 cosas que perjudican a un aspirante conseguir un puesto de trabajo.

Vestimenta poco apropiada
Excesiva cordialidad con el entrevistador
Aparentar desinterés
Hablar de experiencias anteriores de forma negativa
Criticar antiguos compañeros y ex-jefes
Que suene el móvil o incluso contestarlo
Dar respuestas ambiguas
Falta de información del puesto o la empresa
Mentir o no ser del todo honesto
No repasar la información del CV