Cómo escribir los objetivos en el currículum

Un currículum es un documento que en la mayoría de ocasiones es decisorio para optar a un puesto de trabajo o no, o por lo menos de hacer que el candidato continúe o quede eliminado para la siguiente fase del proceso de selección: la entrevista. Por eso es muy importante hacer que el CV sea lo más atractivo posible para la reclutadores, para que capten su atención pero sin salirnos de un diseño y estructura seria y profesional. ¿Cómo podemos hacerlo? Una forma sencilla, eficaz y que puede ayudar al postulante es incorporar una sección de “objetivos”. Para ello, te explicamos a continuación la importancia de los objetivos de los currículums; por qué debes incluirlo, qué información debes poner allí y cómo debe estar redactado.

Qué poner en objetivos en el currículum

• Resumen. Debemos tener en cuenta que los objetivos tienen que ser un texto en el que digamos qué queremos conseguir en el nuevo puesto de empleo y recordar qué tipo de candidatos somos. Por ejemplo, si el postulante es abogado y ha trabajado en varios bufetes debe incluir estos datos en los objetivos del CV. El reclutador dedica varios segundos a cada currículum cuando el volumen que recibe es muy alto; por eso, es fácil que fije la mirada en un apartado que le vaya a hacer un resumen del resto de la información.

• Personalizado. Siempre es recomendable tener dos modelos de CV hechos, especialmente si vamos a postularnos a varios sectores profesionales diferentes. Sin embargo, resulta muy complicado personalizar la estructura del documento a cada empresa que nos interesa. Para no perder tiempo cada vez que queramos hacer un currículum personalizado, podemos limitarnos a modificar el texto de los objetivos. Aquí podemos hacer referencia directa a la compañía que enviamos el CV, explicar las tareas que estamos capacitados a realizar y resaltar aquellas aptitudes que serían idóneas para el puesto y nosotros tenemos.

• Breve. Aunque el peso de la información debe estar en la experiencia y formación, los objetivos deben ser un apartado breve pero que capte la atención y en el que se comprima lo más importante del documento. Debe ser un solo párrafo, que no tenga una extensión máxima de entre 8 y 10 líneas. Es importante que utilicemos el tiempo verbal de primera persona del singular para que el texto ‘coja fuerza’. Aquí podemos añadir nuestra edad, en vez de poner en los datos personales nuestro año de nacimiento.

• Claro y conciso. Lo más fácil de un CV es plasmar la información al papel, puesto que tras saber qué tipo de currículum queremos usar, simplemente tenemos que ordenador nuestros datos de forma cronológica, por temática o de forma mixta. Sin embargo, los objetivos los redactamos completamente nosotros, intentando sacar en unas frases lo mejor de nosotros en relación al puesto de empleo que nos postulamos. Haz varios textos de objetivos diferentes, léelos varias veces e incluso pide consejo a otras personas para que te den su opinión sobre cuál es el que mejor te define.

• ¿Dónde lo ponemos? Aunque muchos postulantes suelen darle más importancia a la formación y después a la experiencia, nosotros creemos que ese tipo de estructura está obsoleta y que hoy en día priman más los trabajos que se han realizado que los estudios previos a ello. Por eso, te aconsejamos que el diseño de tu CV sea: datos personales, objetivos, experiencia y formación. De esta forma, en un primer momento los reclutadores sabrán cómo te llamas y dónde vives, después conocerán lo esencial sobre ti y sobre lo que buscas en la sección de objetivos, y por último conocerán a qué te has dedicado y que formación académica has adquirido.