Cosas que no debes preguntar en una entrevista de trabajo
Una vez que ya sabemos cómo encarar una entrevista, nos vemos obligados a no dejar de lado la pregunta final, la cual el entrevistador no se olvida de formular ¿Tiene alguna pregunta? Ahora a nosotros nos toca preguntar, y siempre sucede que respondemos con negación, eso es un error porque existen preguntas que se pueden realizar y no quedan mal vistas, es decir, podemos seguir demostrando nuestras capacidades respondiendo esa pregunta final.
Disponer de una buena pregunta típica de una entrevista no solo le denotará al entrevistador que dispones de un interés considerable en ese puesto sino también que te interesa la empresa y ese es un buen punto a considerar, recuerda que es la oportunidad de preguntar algo que no sepas sobre la compañía y que por supuesto no se puede encontrar en ningún sitio web.
Pero en el presente artículo se centrará la atención en las preguntas que no se deben formular, por lo tanto, cabe resaltar que puede ser un paso fundamental y eso es motivo que te resten puntos si se realiza una de esas preguntas escandalosas y poco viables.
El primer aspecto es no tutear al profesional, recuerda que no es tu amigo y no tiene porqué serlo. Se deben dejar de lado las preguntar exclusivamente personales como ¿Fuma? ¿Toma bebidas alcohólicas? ¿Tiene hijos? ¿Se divorció?, tampoco se pueden realizar preguntas sobre discapacidades, nacionalidad, temas políticos, orientación sexual ni temas religiosos.
Existe un tema que nos genera dudas sobre si preguntar o no y se trata del salario. Cuestionar sobre el salario ni bien entras al lugar hará que pierdas puntos de entrada porque dará la imagen de alguien que únicamente le importa el dinero, por lo tanto, no debes iniciarlo al menos que se te pregunte específicamente. Al igual que preguntar sobre las vacaciones o el tema del horario, en ese momento no se recomienda adelantarse a pensar como si estuvieras contratado.
Lo mejor es proponerse a escuchar y hablar con cordialidad cuando sea el momento adecuado, limitarse a responder las preguntas formuladas por el entrevistador y siempre dejar para el final la pregunta sobre la empresa que demuestre el interés sobre el puesto laboral.