Networking para personas con discapacidad

En la actualidad cada vez está tomando más importancia la palabra networking. Cuando hablamos de networking nos referimos a la red de contactos que formamos cuando asistimos a eventos y actividades que nos dan la posibilidad de relacionarnos con otros profesionales, dar a conocer nuestras ideas o empresa y  encontrar nuevas oportunidades de negocios. Pero no se trata solo de estar en contacto si no de generar relaciones de colaboración mutua. Esta herramienta le permite a la gente que lo utiliza, afianzar relaciones con clientes actuales, dar a conocer nuestra empresa o idea de negocio, conocer a potenciales socios o clientes, aumentar las ventas e incluso hacer nuevas amistades.

Pero cuando nos referimos a  personas con discapacidad, el networking se vuelve aún más importante. El mismo les brinda a estas personas la oportunidad de insertarse en el mundo empresarial. Es conocido que en un contexto de incertidumbre creciente, el mundo laboral se está volviendo cada vez más difícil.

 Esto es aún más cierto para personas que tienen limitaciones físicas, el universo profesional se vuelve especialmente arduo, ya que muchas veces las empresas no contratan este tipo de personal y la inserción laboral parece una misión imposible, ya que existen fuertes obstáculos en el acceso al trabajo de las personas con discapacidad establecidos en prejuicios con la capacidad de este grupo de desempeñar de manera eficiente las funciones que se les asignan.

Los prejuicios más comunes que refuerzan lo expresado anteriormente, son que las personas con discapacidad tienen un alto porcentaje de ausentismo debido a que se enferman con mayor frecuencia o que necesitan que la empresa realice reformas arquitectónicas para poder desarrollar su trabajo. El desconocimiento, el temor a accidentes y cierto componente de discriminación son los obstáculos para la integración de estas personas.

Ante esta situación el networking se convierte en una herramienta para que la persona con discapacidad genere sus propias oportunidades laborales, ya que estas  pueden realizarlo  a través de las redes, las que le permiten acceder a una mayor cantidad de personas con menor esfuerzo. Los pasos esenciales para empezar son:

1. Establecer un objetivo profesional ¿Qué quieres lograr?
2. Contactar  a la gente adecuada: utilizar linkedin es una alternativa viable. Se puede utilizar Facebook también, sin colocar fotos o comentarios demasiado personales.
3. Establece un diario en la que registres las oportunidades que han surgido, las personas con la que deberías contactar, elaborar un listado de puntos a mejorar.
4. Seguimiento de contactos: enviando emails con información relevante o simplemente saludando para su cumpleaños. Es importante que seas un contacto activo.

Una vez que la persona realizo los pasos anteriores, es el momento de dar otro paso importante, que es la conexión personal. Para llegar a este punto es importante utilizar nuestras habilidades interpersonales y generarle a la otra persona la curiosidad de conocerte. Debes haberte asegurado que la persona haya tomado conocimiento de tus mejores cualidades.