Por qué no mentir en el CV
Buscar trabajo es una de las tareas más arduas ya que hoy en día la oferta de empleo es muy escasa en proporción con el gran número de personas en situación de paro. Por eso, resulta muy tentador para muchos postulantes incorporar en su CV algún dato que no es real o exagerar alguna de las informaciones explicadas en este documento. Nuestro consejo es que seas honesto contigo mismo y con los reclutadores ya que los peligros de mentir en el currículum son mucho mayores que las posibilidades que nos pueden aportar a la hora de conseguir un puesto de empleo.
¿Por qué no debo mentir en el CV?
- Formación. Cuando la formación se convierte en un requisito indispensable para optar al puesto de empleo es porque ese oficio exige de una titulación real para ejercer el trabajo. Si no cuentas con ella, no mientas en el currículum ya que te lo pedirán antes de contratarte. Si ven que no acabaste tu formación académica, que te quedan asignaturas pendientes o que nunca has tenido estudios relacionados con ello, la empresa te rechazará automáticamente e incluso puede avisar a otras empresas sobre esta situación.
- Experiencia. Hoy en día, muchas empresas están dando más importancia a la experiencia previa de sus candidatos que la formación que han recibido previamente. ¿Te has sentido tentado de mentir en el CV poniendo un trabajo que nunca existido o ‘engordando’ las fechas o tareas que realizaste anteriormente? Puede que llame la atención al seleccionador ese dato, pero seguramente te preguntarán en la entrevista de trabajo sobre ese puesto de empleo por el que has mentido. Si no es real, el reclutador se dará cuenta enseguida y perderás toda la credibilidad que podías tener para la empresa siendo rechazado automáticamente.
- Idiomas. ¿Cuántas veces has sido eliminado de un proceso de selección por el nivel de inglés? ¿O cuántas veces no te has apuntado a una vacante porque no tienes conocimientos en otros idiomas? Mentir en los idiomas es una de las ‘tentaciones’ que más se repiten en los postulantes, sobre todo al poner el nivel que se tiene sobre esa lengua. Poner un “nivel medio de francés” cuando no se puede tener una conversación con un nativo no es una afirmación real, por lo tanto, ten mucho cuidado en mentir en el currículum sobre los idiomas porque es fácil quedar en evidencia delante del reclutador.
- Habilidades. Igual que con los idiomas, es my habitual mentir en habilidades relacionadas con la informática. Conectarse a las redes sociales de forma diaria no te convierte en un “experto en informática”, así que se muy concreto con los programas o herramientas que sabes utilizar. No incluyas cursos o diplomas que nunca has realizado para impresionar al reclutador; puede que llegues a conseguir el puesto de empleo y un día te pidan realizar una tarea relacionada con una de las habilidades de tu CV y que en realidad era mentira… ¿De verdad quieres arriesgar tu futuro laboral por una pequeña mentira?
- Edad. Hoy en día tener más de 30 años te convierte en un desempleado con menos oportunidades de encontrar un puesto de trabajo, simplemente por el hecho de que muchas empresas optar por hacer contratos a gente muy joven. Pero no por ello debemos mentir en nuestra edad ya que es uno de los datos más fáciles de comprobar para un reclutador. Imagínate que dices que tienes 40 en vez de 48 y que llegan a contratarte, ¿cómo explicarás a la empresa esta mentira cuando tengan tu DNI para hacerte el contrato? Se honesto y si consigues un empleo será por tu experiencia y por ser un candidato idóneo para desarrollar ese trabajo.