Qué habilidades evitar en el CV

Con la amplia demanda de candidatos en situación de desempleo y la escasa oferta de puestos de trabajo resulta complicado destacar ante un proceso de selección. El CV es el documento decisivo para conseguir que un reclutador quiera dedicar más de 10 segundos en conocer más sobre nosotros, y de ahí radica la importancia que tiene que redactemos y elaboremos un currículum atractivo y acorde a nuestros conocimientos y antiguas experiencias. Pero en ocasiones ponemos información que no aporta ningún interés al seleccionador o indicamos habilidades que no suelen impresionar a las empresas. En el siguiente artículo queremos ayudarte a evitarlo y hacer tu CV mucho más atractivo en la búsqueda de empleo y consigas pasar a la siguiente fase: la entrevista.

• Tu primer trabajo. ¿Eras bueno paseando perros cuando tenías 15 años? ¿Te sacaste un dinero en el instituto cuidando a tu vecino? Aunque puede que en algún momento de tu vida sea interesante destacar tus primeras experiencias, en un CV profesional es recomendado omitir este tipo de trabajos. Piensa que lo ideal es que este documento tenga una página, como mucho dos, y por lo tanto hay que saber resumir y destacar lo importante y relacionado con el puesto al que te postulas.

• Intereses no relacionados. En ocasiones, hay candidatos que incluyen en su CV los intereses que tienen como la música, el deporte, la naturaleza… Este tipo de información no interesa a las empresas ya que en caso de querer conocer en profundidad a un aspirante, lo llamarán para una entrevista de trabajo. Y solo en el caso de que llegue a la siguiente fase del proceso de selección y el reclutador le pregunte, podrá explicar más cosas sobre sí mismo, como por ejemplo sus intereses personales.

• Notas.  Muchos candidatos son partidarios de incluir en el currículum las calificaciones que sacaron a lo largo de su carrera, en un máster, en un curso… Puede que para algunos reclutadores resulte interesante, pero a la mayoría de empresas no les interesa saber qué cifra obtuviste. Las notas no siempre tienen relación con tu real conocimiento sobre una materia o puede contar mucho más la experiencia laboral que luego has tenido sobre un área profesional que una simple calificación.

• Resumen de tareas. Aunque puede resultar conveniente explicar junto a cada experiencia laboral las tareas que el candidato desarrollaba, tampoco hay que ser demasiado extenso. La capacidad de saber resumir de forma óptima en un CV es complicada pero valorada en muchos seleccionadores, ya que la mayoría prefieren poner grandes bloques de texto perjudicando así el atractivo de este documento. Si el título de la experiencia que incluyes ya indica el puesto de empleo que llevaste a cabo, es suficiente para que el entrevistador se haga una idea de qué sabes realizar.

• Adjuntar diplomas. Si tus habilidades han sido certificadas con numerosos diplomas, está bien que lo indiques con un breve apartado en la parte final del CV, pero no tienes que adjuntarlos cada vez que dejes este documento en una empresa. ¿Cuándo se puede hacer una excepción? Si por ejemplo has realizado varios cursos corporativos de una compañía y quieres cambiar de trabajo pero manteniendo tu puesto en la misma empresa; entonces, sí que deberías adjuntarlos escaneándolos, pero sólo porque quieres evidenciar tu experiencia en un empleo similar.

• CV ‘poco convencional’. Hay algunos candidatos que quieren demostrar sus habilidades en diseño, creatividad o informática utilizando su currículum como medio. Es decir, haciendo un documento poco convencional, con tamaños y colores llamativos, usando una infografía en vez de un CV con texto, incluyendo imágenes… Es evidente que un documento que llame la atención a un reclutador puede ayudar al candidato a pasar a la entrevista de trabajo, pero este tipo de habilidades usadas en exceso o siendo mal aplicadas no son del todo recomendadas.