Preguntas de una entrevista | Cómo contestar

Cuando conseguimos que nos llamen de una entrevista de trabajo llega una de las fases más complicadas de la búsqueda de empleo: superarla. Y es que debido a la escasa oferta de puestos frente a la alta demanda de desempleados resulta muy difícil satisfacer las necesidades de los seleccionadores de la empresa. Por eso, te ofrecemos una serie de estrategias para contestar las preguntas de una entrevista de forma que agrades al entrevistador y demuestres que eres el candidato idóneo para la vacante.

Tareas a realizar. Puede que en la misma semana tengas que realizar varias entrevistas o que te hayas postulado a tantos puesto de empleo que no recuerdes con exactitud en qué consistía el trabajo para el que vas a hacer la entrevista de trabajo. Siempre debemos tener claras las tareas a realizar para la vacante que nos hemos presentado para saber con exactitud qué podríamos aportar en relación a nuestra anterior formación y experiencia.

Información de la empresa. Del mismo modo, es muy importante que hagamos una previa investigación sobre la empresa que nos va a entrevistar. A qué se dedica, su volumen de ventas, el número de empleados, si es una compañía nacional o internacional, qué tipo de productos y servicios ofrece… Hoy en día es muy sencillo averiguar en poco tiempo todo lo que se ha publicado sobre cualquier empresa, incluso si dispone de página web podremos leer a fondo todo lo relaciona con ella. Puede que te pregunten sobre la compañía y qué mejor forma de ‘esquivar’ este tipo de preguntas que estar totalmente documentado sobre el tema.

Sinceridad. Una de las premisas que debemos tener en cuenta a la hora de hablar con el seleccionador es la sinceridad. ¿Incluso si nos han despedido? Sí; es preferible admitir que nos han echado de un trabajo que la empresa haga sus propias investigaciones y quedemos como un candidato mentiroso. Ser sincero no quita que podamos omitir cierta información, es decir, en relación a experiencias poco satisfactorias no siempre tenemos que dar todos los detalles ya que no nos interesa quedar en mal lugar.

Afán por trabajar en la empresa. Una de las preguntas más habituales por parte de los seleccionadores es “¿por qué quieres trabajar con nosotros?”. Debes tener siempre una respuesta preparada para ello y no dudar ni un segundo en contestarla. Puedes crear una contestación general en la que expliques tu motivación por mejorar en tu futuro laboral y compartir con nuevos compañeros tus anteriores experiencias, pero también te recomendamos personalizarla al máximo. Es decir, añade algunos detalles que centren tu afán por trabajar en esa empresa en concreto.

Virtudes y defectos. Una de las cosas más complicadas es hablar de uno mismo y mucho más si piden que lo haga la persona que decide tu futuro laboral. Por eso, esta cuestión la debemos tener preparada siempre que acudamos a una entrevista de trabajo ya que es una de las preguntas más típicas. En ocasiones nos piden que digamos 3 virtudes y 3 debilidades y otras veces sólo 2; siempre tenemos que llevar pensadas varias y ajustarnos a la situación del puesto de empleo y la empresa que nos postulamos.

Pensar en el futuro. Si creías que aquello de “qué quieres ser de mayor” era una pregunta sólo para niños te equivocas; una de las preguntas más repetidas en las entrevistas de trabajo es “cómo te ves en el futuro” o “dónde crees que estarás en 5 años”. Se sincero pero intenta agradar los oídos del seleccionador; es decir, la respuesta evidente es decir “trabajando en su empresa”, pero sé un poco original manteniéndote humilde y sincero.

Abstenerse a opinar sobre otras experiencias. Bajo ningún concepto hables mal de anteriores experiencias, jefes o compañeros de trabajo. Puede que sea verdad lo que cuentas, quizá es verdad que las situaciones desagradables se produjeran por tu entorno laboral pero eso no lo puede corroborar el entrevistador. Por lo tanto, lo mejor es que te abstengas a opinar sobre otras experiencias; si te preguntas sobre ello, esquiva la cuestión respondiendo brevemente y sin dar apenas detalles ya que uno de los errores más frecuentes en una entrevista es dar más información de la solicitada.