Consejos para empezar un nuevo empleo

Consejos para empezar un nuevo empleo

No es fácil cambiar de trabajo o empezar en nuevo puesto de empleo. Sentirse el ‘nuevo’ nos hace estar un poco inseguros, no saber con certeza si nos va a gustar las tareas que tendremos que hacer, si nos llevaremos bien con los compañeros de trabajo, si será un puesto estresante… Ante la ansiedad que genera empezar una nueva experiencia laboral, te ofrecemos una serie de consejos para adaptarse a un nuevo empleo con éxito.

Primeros días de trabajo

  • Llegar a antes de hora. La puntualidad es una de las pocas cosas que dependen totalmente del propio candidato, por lo tanto, es imprescindible llegar antes de hora al trabajo. Es lógico que los primeros días puede resultar complicado calcular cuánto vamos a tardar en llegar, si va a haber atasco, si será difícil aparcar por la zona… No pongas excusas y prepara la ruta al trabajo con antelación analizando cómo te resultará más rápido llegar, en qué zonas podrás dejar el coche o dónde puedes coger el transporte público.

 

  • Fijar, escuchar y apuntar. Al principio todos nos sentimos un poco perdidos, por eso, la mejor forma de adaptarnos con rapidez a un nuevo puesto de empleo es fijarnos, escuchar y apuntar todo lo que creemos interesante. Pero no sólo eso, sino que cuando lleguemos a nuestra casa o en el descanso del trabajo tendremos que repasar dichas notas para recordarlas en los primeros días de trabajo. Apunta nombres y cargos de tus empleados, escribe las contraseñas o claves que te den como nuevo empleado, escribe cómo se realizan algunas tareas que tendrás que hacer… Observar al resto de compañeros y consultar tus dudas con ellos también te será de utilidad para mostrarte como un candidato implicado y poder actuar con autonomía cuanto antes.

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  • Simpático, sonriente y sincero. Pero para poder tener confianza con los compañeros en poco tiempo debes ser ante todo extrovertido. Si te resulta complicado ser abierto con los demás, prueba la técnica de ser simpático, sonriente y sincero. Es decir, si se dirigen a ti muéstrales una sonrisa, háblales de forma simpática y responde con total sinceridad. Sólo así conseguirás que el resto de empleados te vean como uno más y formes parte del equipo cuanto antes. Pedir ayuda a tus compañeros será indispensable para una adaptación total al puesto de empleo, no sólo porque te podrás apoyar en ellos en los primeros días, sino porque de ellos descubrirás de primera mano cómo funciona la empresa.

 

  • Parar sin exceso. ¿Hacen descansos en la empresa? ¿Puedo ir a almorzar? Una de las reglas básicas en todo trabajo es que ante la duda, preguntes; y si vas a parar, no debes hacerlo en exceso. Intenta fijarte en qué hacen el resto de compañeros o pregunta directamente a alguno de ellos si se toman algún descanso pero nunca tomes la iniciativa en este sentido por tu cuenta. Sobre todo, evita las pausas innecesarias como fumar, tomar más de un café, salir a llamar por teléfono… Es recomendable que los primeros días lleves de tu casa un almuerzo, una botella de agua o algo para picar, para que no tengas que salir fuera del trabajo en caso de que el resto de compañeros lo traigan desde casa.

 

  • No marcharte el primero. Y del mismo modo que debes ser de los primeros en llegar al trabajo, también debes ser uno de los últimos en marcharte. Evita irte el primero, aunque creas que ya has hecho tu jornada laboral. Al menos que un superior te diga que ya puedes irte a casa, intenta ver cuándo se van tus compañeros. En caso de que ellos hagan una jornada más larga que la tuya, consulta con alguno a qué hora se suelen marchar, pero hazlo de un modo sutil y que no parezca que tú ya quieres marcharte.